VIAJE
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9 min lectura
por Francisca Ribeiro, Marketing & Communication
Publicado Febrero 17, 2023
| VIAJAR | NIÑOS | GUÍA | LUGGIT |
Lo sabemos, ¡viajar con niños puede ser muy estresante! Llevar todas tus maletas, cargar con un carrito de bebé o una sillita de paseo, hacer el check-in en el hotel y llegar a tiempo, mantener a los niños entretenidos... Pero nosotros podemos ayudarte con algunas de estas cosas. Con LUGGit, puedes aprovechar la ciudad sin cargar con tu equipaje. Recogemos tus maletas (incluido tu carrito de bebé si es necesario), las guardamos y te las devolvemos en el lugar y a la hora que elijas.
Queremos asegurarnos de que los niños siempre tendrán buenos recuerdos de sus vacaciones, así que hemos elaborado una lista de actividades para niños que podrás disfrutar la próxima vez que visites una de nuestras ciudades. Pero antes, para que no tengas que estresarte con tu equipaje y el de tus hijos, entréganoslas a nosotros. En LUGGit recogeremos, guardaremos y entregaremos tus maletas en el momento y lugar que desees para que puedas disfrutar de tu viaje sin estrés.
Viena
Viena es un lugar maravilloso para visitar con niños. Los menores de seis años viajan gratis en el transporte público. Los menores de quince años también viajan gratis durante las vacaciones escolares oficiales, los domingos y los días festivos. Además, hay un montón de actividades pensadas para todos ellos.
Para empezar, Viena alberga uno de los parques de atracciones más antiguos del mundo, el Parque Prater. El parque, que aparece en el clásico del cine El tercer hombre (1949), es perfecto para un pequeño paseo con los niños, con vistas a las más de 250 atracciones, un museo del chocolate y una carrera de caballos con arneses. No hay que olvidar la noria gigante Riesenrad y disfrutar de su magnífica vista de la ciudad.
Para una tarde llena de diversión pero también de contenido educativo, deberías llevar a los niños al Museo Infantil ZOOM. Este museo infantil, a diferencia de otros museos, no cuenta con espacios de exposición abiertos, sino con una serie de exposiciones temáticas acompañadas por personal del museo. Estas exposiciones están pensadas para inspirar a los niños a explorar a través de diversas actividades acordes a su edad.
Con el mismo ambiente educativo y de entretenimiento tanto para niños como para padres, puedes visitar el Museo de Historia Natural. Detrás de las paredes de este edificio de finales del siglo XIX, con sus elaboradas salas y su cúpula, se esconden cuatro mil millones de años de historia. Desde la Venus de Willendorf, con 25.000 años de antigüedad, hasta la exposición de dinosaurios favorita de los niños, que incluye numerosos fósiles completos, así como reproducciones mecánicas en movimiento y a tamaño real, nada te impedirá pasar un día increíble con los niños.
Uno de los edificios más bonitos que visitar en Viena es la Casa Imperial de las Mariposas. Justo en el corazón de la ciudad, encontrarás un oasis tropical único incrustado en una de las casas de palmeras Art Noveau más bellas del mundo. Todo el edificio te transporta a un entorno de ensueño en el que estarás rodeado de hermosas plantas y todo tipo de criaturas maravillosas.
Photo by Monsieur Sky on praterwien.com
Praga
La belleza de Praga no pasa desapercibida para los niños, al contrario, ven Praga como un gigantesco parque infantil recién salido de las páginas de un cuento de hadas. Por eso, cualquier cosa que hagas, como por ejemplo un simple paseo por el Puente de Carlos, será tan mágica para tus hijos como para ti. De cualquier modo, hay actividades en Praga que sin duda mejorarán la experiencia de los niños en la ciudad.
Empezando por el Museo Técnico Nacional, el cual será un éxito 100% con cualquier niño enamorado de los aviones, los trenes, el chocolate y todo lo que allí se muestra. Considerado uno de los museos más antiguos y grandes del país, podrás visitar una muestra de innovaciones tecnológicas en 14 áreas diferentes que te gustarán tanto a ti como a tus hijos. En él se exponen piezas únicas, como el primer automóvil fabricado en el país y varios aviones utilizados en la Segunda Guerra Mundial.
Los LEGO son un éxito seguro entre los niños (y también entre algunos padres), y si te encuentras en Praga con una hora libre, debes visitar Czech Repubrick. En esta exposición, encontrarás la hermosa ciudad que estás visitando, enteramente hecha de LEGOs, desde el Puente de Carlos hasta la Catedral de San Vito. Y por si una no fuera suficiente, hay otra exposición de LEGO en la ciudad; ésta no es sólo la mayor de la ciudad, sino la mayor de todo el mundo. El Museu LEGO supera a todos los demás del mismo tipo por ser el de mayor tamaño y número de exposiciones. A medio camino entre el Puente de Carlos y la Plaza de Wenceslao, se encuentra este mundo de imaginación hecho de ladrillos, en el que incluso puedes crear tu propia maqueta.
Cuando tus hijos se queden con hambre (hambrientos y enfadados), llévalos al Restaurante Ferroviario Výtopna, donde te traen la comida en un tren en miniatura. Obviamente, es un momento maravilloso para cualquier niño, pero estamos seguros de que la mayoría de los padres disfrutan igual. El restaurante sirve comida típica checa y también hamburguesas, lo que hará a los niños aún más felices.
Para pasar una tarde relajada, sube al funicular a la Colina de Petřín, desde donde obtendrás una de las vistas más espectaculares de la ciudad. La colina es fácilmente reconocible por su torre de televisión que recuerda en cierto modo a la Torre Eiffel (a la que se puede subir para disfrutar de unas vistas más impresionantes). En esta zona encontrarás un puñado de actividades que seguro te entretendrán a ti y a los niños. El laberinto de espejos, con sus espejos deformes, seguro que te arrancará unas cuantas carcajadas. De febrero a noviembre, los fines de semana por la tarde (y a diario en verano), los niños pueden montar en poni o a caballo (¿a qué niño no le gusta un poni?). También está el observatorio y la hermosa rosaleda.
Barcelona
España tiene algunas de las mejores ciudades para visitar con niños. Las ciudades son fácilmente accesibles y se pueden recorrer andando, y los ciudadanos locales son de lo más simpáticos. Barcelona, que une la vida de la ciudad con la de la playa, es perfecta para que tus hijos alimenten los recuerdos de unas vacaciones en familia.
En el Park Güell, diseñado por Antoni Gaudí, la imaginación de tus hijos se verá alimentada por los coloridos mosaicos de azulejos rotos que decoran paredes y asientos, las juguetonas líneas curvas y los frescos paseos. Este parque, imprescindible en cualquier guía de Barcelona, es el lugar perfecto para que los padres hagáis turismo por la ciudad sin aburrir a los niños.
Para escapar del ajetreo de la ciudad y hacer un viaje al siglo XVIII, puedes disfrutar de una tarde tranquila en un parque laberíntico. El Parc del Laberint d'Horta fue donado al ayuntamiento por los Davall y está abierto al público desde 1971 por una entrada simbólica. Mientras que a los niños les encantará el laberinto de 2 metros de altura en el que seguro que jugarán al escondite, a los mayores os encantarán los templos, pabellones y estatuas de dioses romanos y figuras mitológicas repartidos por todo el parque. Los hermosos jardines y árboles son perfectos para un paseo romántico y para incitar la curiosidad de los niños.
Para disfrutar de otro buen parque familiar (y mucho más cerca de la ciudad), puedes dirigirte al Parc de la Ciutadella. Este parque, construido para albergar la Exposición Universal de 1888, conserva el mismo glamour del siglo XIX, con su hermosa fuente central que representa el nacimiento de Venus. Los niños pueden dar de comer a los patos y gansos que viven en el lago, ver la estatua de más de 100 años del mamut lanudo y sentarse en su tronco para hacerse fotos, se pueden alquilar barcas y remar por los alrededores y visitar los diversos invernaderos botánicos.
Para un pequeño tentempié después de toda la aventura del día, asegúrate de ir a una churrería. Este manjar frito bañado en chocolate es un éxito entre los locales y también entre los más pequeños. Un churro es imprescindible cuando se viaja a cualquier ciudad española, así que, como era de esperar, hay unas cuantas churrerías por la ciudad que te recomendamos: Comaxurros, Chocolatería La Nena y Xurreria San Roman.
Para un día de diversión y emoción para los niños, haz una excursión de un día a PortAventura. El parque temático, situado a una hora de Barcelona, está dividido en 6 partes: Mediterránea, Polynesia, China, México, Far West y SésamoAventura. El parque se inauguró en 1995, y es conocido sobre todo por su atracción estrella, el Dragon Khan. Todo el complejo alberga varios hoteles, un campo de golf, un club de playa, un parque acuático y un centro de convenciones.
Lisboa
Al igual que España, Portugal es conocido por sus amables habitantes, que adorarán a tus hijos, y Lisboa no es una excepción. Aunque a primera vista las famosas colinas empinadas de la ciudad no parezcan una buena idea para pasear con los niños, esta ciudad será sin duda una de las favoritas de los pequeños.
Empieza por dirigirte al Oceanário, la casa de 8.000 criaturas marinas y 500 especies diferentes, situada en el Parque de las Naciones. El acuario de Lisboa es uno de los más grandes de Europa y es una experiencia inmersiva que suele ser un gran éxito entre los más pequeños. Aquí pueden ver las únicas nutrias marinas de Europa, tiburones y caballitos de mar y participar en las diversas iniciativas que la fundación tiene para los niños. Compra tus entradas con antelación aquí.
Justo enfrente, encontrarás el Pabellón del Conocimiento, un museo interactivo de ciencia y tecnología que estimulará los conocimientos científicos de niños y mayores. Es una forma estupenda de que tus hijos amplíen sus conocimientos científicos a través de experiencias científicas, juegos y actividades interactivas.
También puedes visitar el 3D Fun Art Museum. La experiencia interactiva cuenta con más de 40 escenarios diferentes que incluyen imágenes en 3D e ilusiones ópticas que incentivarán la imaginación de tus hijos. Este museo será ideal para que tus hijos se hagan fotos divertidas y recuerden con cariño su viaje a Lisboa.
A continuación (probablemente ya en tu lista de cosas sobre qué hacer en Lisboa), prepárate para subir esas colinas y llegar al Castelo de São Jorge La vista de la ciudad será impresionante y hará volar la imaginación de tus hijos mientras corretean explorando el castillo y ven los pavos reales de la residencia. También puedes echar un vistazo a la cámara oscura para disfrutar de una vista de 360º en tiempo real de la ciudad.
Por último, asegúrate de dar un paseo en tranvía. Este básico de Lisboa suele ser un momento divertido para los niños, además de que te ahorras otro paseo. El emblemático tranvía amarillo 28 le llevará a recorrer las mejores vistas de la ciudad, desde la Catedral de Lisboa hasta el Terreiro do Paço. Con la tarjeta Lisbon Card podrás acceder al tranvía, a otros medios de transporte y a varios museos.
Oporto
La capital del norte de Portugal suele pasarse por alto como destino familiar, ya que es conocida sobre todo por el vino de Oporto. Se trata de una idea equivocada. Oporto es un lugar estupendo para pasar un par de días relajándose y explorando.
El primer lugar que debes visitar no está en Oporto, sino en Vila Nova de Gaia. Allí podrás ver el World of Wine, un complejo de museos, bares, restaurantes y una escuela de vino. A los niños les encanta sobre todo la Historia del Chocolate, varias exposiciones interactivas que cuentan la historia del chocolate en el mundo, e incluso pueden probar su propio chocolate y llevárselo a casa por un módico precio. Mientras los padres degustan el famoso vino y chocolate de Oporto, los niños pueden divertirse haciendo cake pops.
Ahora, cruza el río y visita el Palácio da Bolsa, el antiguo palacio de la Bolsa de Oporto. A los niños les encantan los palacios, y los complejos detalles de las paredes les dejarán asombrados. La visita guiada es obligatoria, pero merece la pena. Con diferencia, la sala más chula es la árabe, con arquitectura y decoración típicas de esta cultura.
A continuación, dirígete a la Galería Immersivus, en Furnas da Alfândega do Porto, dónde podrás visitar la exposición Impresionante Monet y Brillante Klimt. En el espacio subterráneo, podrás rodearte de las mágicas obras de Monet y Klimt que han saltado de los marcos y salpicado las paredes. Esta exposición inmersiva es una forma estupenda de mostrar a los niños la hermosa obra de algunos de los más grandes artistas de todos los tiempos.
Los amantes de la franquicia de Harry Potter (e incluso los que no lo son) no pueden dejar de visitar Livraria Lello, la librería en la que se dice que se inspiró la autora para crear el famoso mundo de fantasía. La carpintería, increíblemente detallada, te dejará boquiabierto, y la escalera de caracol será perfecta para algunas fotos.
Por último, para terminar un largo día de exploración, ve a los Jardines del Palacio de Cristal donde podrás explorar los hermosos jardines y la cúpula de cristal. El parque ofrece algunas de las mejores vistas de la ciudad, y es perfecto para tomar el sol y para que los niños correteen. Quédate al atardecer y consigue la foto perfecta de la puesta de sol tras el Puente de la Arrábida.
Para más experiencias divertidas que hacer con los niños, echa un vistazo a Fever, Tiqet y LivingTours.
Esperamos que tanto tú como tu familia disfrutéis de vuestras vacaciones, ¡libres de equipaje y estrés! ¡No olvides utilizar nuestro código promocional BLOG10 para obtener un 10% de descuento en tu próxima reserva de un servicio LUGGit!
